Dos mexicanos en la época de Zapata, y dice uno:
- ¡Qué viva la menstruación! ¡que viva la menstruación!
A lo que le contesta el otro:
- Oye mano, querrás decir “la revolución”…
- Es igual… pero ¡que corra la sangre! ¡que corra la sangre!
- ¡Qué viva la menstruación! ¡que viva la menstruación!
A lo que le contesta el otro:
- Oye mano, querrás decir “la revolución”…
- Es igual… pero ¡que corra la sangre! ¡que corra la sangre!
1 comentario:
Madre, como tu ya sabes le tengo prohibido a mi estimado contar chistes,(por lo mal que nos lo hace pasar) pero creo que tu deberias empezar a planteartelo.
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